Sábado 25 de febrero de 2012
El lunes pasado dejé caer un sms
a Javilín, con un poco de mala intención, para ver cuanto me da de si este buen
hombre. El sms venía a decir algo así: “tengo
una propuesta atractiva para este sábado, pero posiblemente no te atrevas.”
A los pocos minutos sonó el teléfono, era mi hombre, Javi Llucas. Cuál es esa
propuesta tan atractiva? El Marie Blanque y el Somport en bici de carretera,
unos 100km y 1900m de desnivel, qué te parece? Y el Sr. Sopena? Hablo con el.
Suena bien pero hablamos mañana. Veinticuatro horas más tarde, un poco de
sensatez, de la cual yo carezco, y una segunda propuesta encima de la mesa, abortan
el plan inicial. No pasa nada, la temporada no ha hecho más que empezar, que
esperen impacientes esos colosos de los pirineos.
Así que con miras renovadas,
damos un giro de 180º y nos decantamos por la sierra de Guara y la btt. Como
siempre, llamamos a Rafa Molinero y este no duda ni un solo instante en unirse
a la pareja feliz. Tenemos pensado hacer una circular uniendo el Salto del Roldán con Gratal, queremos subir por donde hace un par de semanas pero
alcorzando sin llegar al embalse de Santa María, para salir a Belsué, túnel de la Manzaneda , Arguis, y
bordeando el embalse de Arguis, iniciar el ascenso por la vertiente norte de
Gratal y descenso por la sur al punto de partida, completando una circular de
55km y unos 1800m de desnivel. Después de comprobaciones varías, nos emplazamos
el sábado a las 9 de la mañana en el Hotel Monrepós.
Puntuales como un reloj, nos
juntamos el trío en cuestión. Rafa muestra una felicidad contenida, mezcla de
alegría y acongojo, y no es para menos ya que nuestro campeón será padre de una
niña este lunes a eso de las 10 de la noche, si, si, los de Huesca son así de
chulos. De hecho, me acaba de llegar un sms de Rafa confirmando que Sofía acaba
de nacer, ha pesado 3,600kg y tanto su mamá como ella, están muy bien. Enhorabuena
familia!! Por ende, esta salida en btt por Huesca era más que bienvenida, ya
que nuestro compañero de fatigas pasará unos meses en el dique seco, mal
durmiendo entre caquitas, pañales, biberones y llantos varios, lejos del polvo
que aún le queda por tragar.
Como iba contando, antes de
iniciar nuestra matinal, decidimos tomar un café en el Hotel Monrepós. Este
hotel, bar, etc… ofrece dos muy buenas razones para hacer una parada técnica,
una su buen café, y dos su excelente repostería. Aunque yo me tomé un té y
nunca he probado su repostería. La cafeína pone a estos dos como motos y las
pulsaciones se elevan rápidamente, parece que hoy habrá que sufrir. En un abrir
y cerrar de ojos llegamos al salto del Roldán, desde allí y a pesar de la
calima, contemplamos unas vistas espectaculares. El alcorce antes mencionado
nos pone en Belsué y en asfalto nuevamente, iniciamos la subida al túnel de la Manzaneda con un calor
casi del mes de abril. Bajando a Arguis, hacemos una parada técnica en el merendero Lafoz, algo de
viandas, fruta, alguna barrita y té. Reponemos liquido en nuestros bidones y
una vez más engrasamos mi chirriante cadena, esta vez con un poco de fuet de Llucas. Javi
el próximo fuet que no sea tan magro. Gracias amigo por la asistencia.
Reiniciamos la marcha, subida a Gratal, unos 10km con 500m de desnivel, pista
que transcurre en su mayor parte por bosque, excelente en verano, no muy
exigente, pero con un kilómetro final un poco más empinado sobre terreno con
roca transversal incrustada en forma de escalones, y donde una caída tonta
puede provocar algún susto inesperado.
Durante la primera parte de la
subida, Javilín I El Bestia, destroza la sirga del cambio de plato, gafe, más
que gafe, no hay un día que salgas y que no te pase nada. Más tarde pincharía,
y al llegar a la furgo una vez parados, aún se le caería al suelo el emisor
inalámbrico del cuenta kilómetros, si este hubiera podido hablar, seguro que
hubiera soltado una carcajada irónica.
La vista de Gratal es nuevamente
espectacular, nos recuerda a Collarada, divisamos gente arriba, hace un día
espectacular, queremos más, pero es tarde y hay que llegar a comer a casa.
Alguna foto, un cacho plátano y sin más dilación iniciamos descenso por una
pista peligrosa, mucha gravilla y piedra gorda suelta. Las Larsen TT hacen su
trabajo pero no podemos confiarnos, los frenos bien apretados, hasta el punto
que mi freno trasero ya casi no responde, menos mal que por la mañana pusimos
pastillas nuevas al delantero, que tío más dejao…!!!
Tras un rápido descenso llegamos
al coche, nos tomamos una coca-cola rápida, deseamos suerte a Rafa & Cia y
para casa más felices que Ortiz. Y es que la vida está llena de pequeñas buenas
cosas.
Hasta la próxima